viernes, 17 de enero de 2014

COMPRAR O ALQUILAR Primera Parte


A raíz de un artículo públicado en el diario económico cincodias.com, acerca de la las ventajas e inconvenientes de comprar o alquilar una vivienda, nos invitó a realizar nuestra reflexión particular desde la situación de la persona que tiene que tomar la decisión, por lo que hemos decidido compartir con todos vosotros nuestro punto de vista, si bien se nos hizo un poco extenso, decidimos publicarlo en dos partes para que se haga un poco amena su lectura.

Existe un momento en la vida de una persona en el que se plantea la emancipación, y es en ese momento cuando surge la pregunta ¿Comprar o alquilar? Esa es la cuestión. En este post, vamos a analizar desde nuestro punto de vista, las ventajas e inconvenientes de ambas opciones, si bien como hemos dicho para que no se haga muy largo lo vamos a desglosar en dos partes, una con los conceptos fundamentales y otra como reflexiones de segunda derivada, aunque antes de tomar cualquier decisión consideramos necesarios tener en cuenta todos los aspectos que la decisión requiere.

Desde nuestro punto de vista, la opción de comprar es una opción de largo plazo, entre otros motivos por los costes de transacción. Es decir, cuando se compra una vivienda además del precio de la misma, existe un sobre coste de aproximadamente un 10% en concepto de impuestos (IVA, ITP, AJD, etc.), legales (notaría, registro de la propiedad), financieros (constitución de una hipoteca, comisiones bancarias, tasación, gestoría). Este sobreprecio tiene el inconveniente que de ser necesario vender la vivienda en un breve espacio de tiempo, se hace necesario para la conservación del capital invertido venderla un 10% más caro, realidad que puede ser muy difícil debido a la situación de crisis que vivimos. Por lo tanto, una de las razones más importantes para elegir la opción de comprar es la visión a largo plazo.

En los casos de inestabilidad laboral o disposición geográfica tanto por motivos personales o profesionales, la opción más razonable sería la del alquiler. Todo dependerá de nuestras previsiones futuras.

Cuando decidimos la opción de alquilar pueden darse de dos formas, una temporal por razones mencionadas u otras cualesquiera o bien otra a largo plazo como opción de vida. En este último caso y desde el punto de vista económico, nos gustaría señalar lo siguiente.

Si financiáramos el 100% de la vivienda, por cada mensualidad pagaríamos una cantidad que se podría desglosar en dos conceptos. Uno, capital amortizado y dos, los intereses financieros. El capital amortizado es la cantidad de dinero que le devolvemos al banco y los intereses es lo que nos cuesta el dinero, o sea, así como la primera cantidad sería nuestra inversión en vivienda, la segunda se trataría de un gasto.

Si comparamos los intereses pagados mensualmente frente al pago mensual del alquiler, tendremos desde el punto de vista económico la decisión tomada, aunque si fuésemos muy puristas tendríamos que añadir a los intereses pagados la parte proporcional de aquellos gastos que no existen estando de alquiler y sin embargo existen cuando vivimos en nuestra propiedad como los Gastos de Comunidad, el IBI o las Tasas de Basuras, que normalmente las pagan los propietarios y no los inquilinos. La cantidad anual que suman estos gastos se dividen por 12 meses y se sumaría a los intereses para poder compararlo con el pago de la mensualidad del alquiler.


Estos son los puntos fundamentales para tomar una decisión correcta, pero hay otros que también deberíamos tener en cuenta, si bien por no alargarnos los analizaremos en el siguiente post, así que por hoy aquí lo dejamos, en el próximo continuaremos con el tema.